La FORMA SONATA, es la forma utilizada por excelencia en el clasicismo. En las sonatas para piano la estructura se utiliza en un solo movimiento, pero también se puede visibilizar en el primer movimiento de una sinfonía.

 

Cuando el niño entra en contacto con la melodía, comienza a establecer analogías de lo abstracto del sonido, con objetos, realidades o acciones de la vida cotidiana.

 

Para que comprendan que sucede con la modulación, me ha servido poner como ejemplo que la melodía es como un camino que uno transita. Al comenzar a ver que las alteraciones de la tonalidad varían, hay que prestar atención, como si fuera un cartel que se encuentra en la ruta, e indica un cambio en el camino.

Una vez transitado ese atajo, se vuelve a la ruta musical original, cuando aparecen nuevamente las alteraciones correspondientes.

 

Estructura de la forma sonata:

 

  • Exposición: allí se presenta el/los temas que utilizará en la obra. Por lo general hay dos secciones, una en la tonalidad principal, y otra en la dominante. Si es menor, se va a dirigir a la relativa mayor o a la dominante. La transición que se encuentra en la exposición, entre la primera y segunda sección, se aplica para poder modular a la nueva tonalidad. Para finalizar  se encuentra una codetta.
  • Desarrollo: en la segunda sección, se desarrollan los temas presentados en la exposición.
  • Reexposición: allí se repite la exposición, salvo que en la segunda sección aparece la tonalidad original. El movimiento termina con una Coda.

 

Con una explicación sencilla, el niño puede encontrar la forma de la música, que a pesar de ser  invisible, la tiene y  se puede percibir auditivamente, además de leer en la partitura.

 

 

Espero que este material te sea de utilidad.

 

Prof. Emilce Jacobchuk

 

 

 

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